El coach que las empresas necesitan debe estar exquisitamente formado, tener experiencia, actualizar sus conocimientos, garantizar resultados y poderlos medir.

Como agente estratégico en el cambio de las organizaciones y de los líderes y equipos que lo hacen posible, el coach está sometido a las mismas exigencias de transformación que todo el entorno profesional. Digitalización, globalización, multiculturalidad y nuevos ecosistemas de trabajo están cambiando el liderazgo y la manera de relacionarnos en el mundo laboral. Y, todo ello, a una velocidad de vértigo.

Como afirma Héctor Infer, la comunicación de las estrategias no resulta suficiente para alinear las formas de pensar y actuar de quienes las deben poner en práctica con sus clientes y públicos de interés ya que los clientes quieren transformar la capacidad de alinear los valores y conductas de líderes y equipos en un activo estratégico de sus organizaciones.

Es por esta razón que el sector del coaching se está enfocando en el entrenamiento y acompañamiento de los agentes de cambio internos, los business partners, coaches y mentores. Sin duda, la tecnificación creciente de la sociedad, el auge de la economía digital y la aparición de la inteligencia artificial y la robotización están impactando en el sector del coaching, al que se le exige estar a la última en cuanto a tendencias organizativas y de gestión se refiere.

La metodología de Coaching Evolutivo basado en valores personales es la base de la actuación de TransformAction. Aporta modelos y herramientas para percibir, comprender y gestionar los arquetipos culturales que se activan en el trabajo, siendo un método incluido en el libro “10 Arquetipos Culturales para construir los equipos del futuro”, de Héctor Infer (noviembre de 2019).

El Modelo de los Arquetipos Culturales facilita los procesos de integración interna y adaptación externa desde los valores y niveles de conciencia personales; y la adopción de cambios desde el ser (compromiso) más que desde el hacer (cumplimiento).

En TransformAction creemos que el contexto actual exige de los coaches la capacidad para detectar los niveles de conciencia y los valores desde los que operan sus coachees, disposición para actualizar arquetipos culturales (propios y de los demás) y compromiso para facilitar los cambios evolutivos requeridos en sus clientes.

Las organizaciones deberán realizar cambios estratégicos frecuentes para adaptarse a sus mercados y asegurar su sostenibilidad en un mundo VUCA. En este sentido, la formación en Liderazgo y Coaching en los agentes de cambio pueden dotar de herramientas valiosas a los profesionales para materializar el cambio en las organizaciones y poder medir su resultado.

Extracto de la participación de Héctor Infer en el Reportaje de Equipos&Talento Coaching: el compañero del cambio junto a otros profesionales del sector que puedes ver aquí.

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